LA VIOLENCIA
EN EL HOGAR ES EL RESULTADO DE NO TENER A JESUCRISTO EN EL CORAZÓN.
«EN UNA
DISCUSIÓN, LE ENTERRÉ UN CUCHILLO»
Por Carlos
Rey.
«Tengo
alrededor de siete años con mi esposo, y [tenemos] dos niños.... En una
discusión, le enterré un cuchillo pequeño en el pecho. Gracias a Dios, no [fue
nada grave]; pero ahora estamos separados por medidas [legales] y estamos en
espera de un juicio para dictaminar la custodia de los niños. Necesito un
consejo, por favor.»
Este es el
consejo que le dio mi esposa:
«Estimada
amiga:
»Usted
cuenta lo ocurrido como si fuera algo sin mayor importancia que no debiera
tener serias repercusiones. No menciona si está o no arrepentida por lo que
hizo, ni cómo se siente al respecto. De hecho, al contarnos su caso usted no
expresa ninguna emoción sobre lo que pasó ni acerca de la posibilidad de que
pierda la custodia de los niños.
»Casi todas
las mujeres y la mayoría de los hombres expresan sus sentimientos cuando
cuentan sus problemas. Sienten tristeza, vergüenza, temor, ansiedad o una de
las tantas emociones posibles. El hecho de que relate sus problemas con
indiferencia y sin sentimientos pudiera ser indicio de un trastorno emocional.
Combinado con el acto violento que usted cometió, hay suficiente razón para que
sea evaluada cuanto antes por un psiquiatra....
»La
violencia en el matrimonio perjudica a todos los miembros de la familia. Los
hijos sufrirán a causa de la ruptura del matrimonio, sin que importe con quién viva....
»Aunque no
nos cuenta con lujo de detalles la discusión que tuvo con su esposo, es obvio
que usted debió de haberse enojado mucho. Sin duda usted se sintió impotente en
cuanto a alguna situación, y su enojo la impulsó a valerse de un cuchillo para
demostrar que sí tenía poder. Lamentablemente, la violencia no es prueba de
poder sino señal de debilidad. Además, su falta de dominio propio y su patente
desacato de las consecuencias son indicios de que usted necesita ayuda
profesional.
»Mientras
tanto, si de veras está arrepentida, Dios la perdonará si tan sólo se lo pide
en oración en el nombre de su Hijo Jesucristo. Pero usted debe mostrar su
arrepentimiento con la determinación de que va a vivir conforme a las leyes
divinas y a comunicarse con Él todos los días mediante la oración y la lectura
de la Biblia. También necesita una comunidad de seguidores de Cristo que le
ayuden a superar las dificultades que tiene por delante. Así que busque una
iglesia en la que la vida de los miembros demuestra que aman a Dios, y asista
cada vez que tenga la oportunidad.
»Sin
embargo, si bien Dios la perdonará, Él no eliminará las consecuencias que ahora
tiene que afrontar por lo que hizo. Así que pídale que le ayude a tener una
actitud positiva y a depender de Él, pase lo que pase.»